hombro congelado

27 / junio / 2021

Se desconoce la causa concreta que produce el hombro congelado o la llamada también: capsulitis adhesiva. Aun así, se suele pensar que es causada por una fibrosis de la cápsula articular del hombro, acompañada de una inflamación de la misma (muchas veces, de su tejido conectivo). Cuando la inflamación se hace crónica, el hombro queda bloqueado y se hace difícil su movilidad; cosas tan sencillas como cepillarse el cabello o ponerse una camisa, se hacen del todo imposible. Suele ser más habitual en mujeres, en edades mayores a los 40 años, si se sufre de las tiroides, si tienes diabetes o sufres algún problema cardíaco; aunque podría provocarlo también un exceso de ejercicio, o movimientos muy repetitivos con tensión muscular añadida y constante... Incluso, una lesión en la zona cervical podría ocasionar dicha patología. Sus síntomas más comunes son dolor y falta de movilidad.

Para poder diagnosticar el hombro congelado se puede realizar la prueba de Yergason. En mi consulta, suelo tratarlo principalmente con acupuntura distal, electroacupuntura, calor con lámpara TDP o moxibustión, estiramientos y masaje terapéutico (también puede que utilice cremas o tapping); todo en una misma sesión que puede alargarse a más de una hora. El masaje debe tratar no sólo la zona del hombro, sino todos los manguitos rotadores, cervicales y zona escapular para poder aliviar la tensión que pueda haber acumulada.

También es recomendable realizar ejercicios suaves de recuperación todos los días para ir ganando movilidad. Y, en caso de que la patología sea intensa o que haga tiempo que la arrastres, deberías haber ido antes al médico para que realizara un buen diagnóstico. Si no lo has hecho o ves que el dolor persiste, el médico es fundamental.

La recuperación varía según cada persona y el grado de la lesión. Aunque es cierto que en la segunda o tercera sesión la persona debería ir notando mejoría, y que los ejercicios ayudan a mejorar mucho antes de lo esperado.

Comparte este escrito: