La tensión muscular es muy importante cuando estudiamos el aparato locomotor y su desequilibrio. Muchas veces es la causa principal de un dolor de espalda, de cervicales, de fuertes dolores de cabeza, de mareos, incluso de vértigos. Y, en todos estos factores, la ansiedad y el estrés tienen una importancia muy relevante. Las sobrecargas, los desequilibrios posturales o las alteraciones psicológicas se deben tener siempre en cuenta en todos estos casos. En mi consulta de masajes en Sabadell, veo con frecuencia la relación de todos estos aspectos y cómo son capaces de afectarnos a nivel muscular. Por eso, tras realizar un masaje descontracturante y tratar toda la tensión que hay acumulada, siempre suelo indicar a mis pacientes una serie de consideraciones que deberán corregir de aquí en adelante. Porque no se trata de hacernos sólo un masaje, sino de comprender qué es lo que nos produce esta tensión excesiva y de aprender a controlarla de forma voluntaria.
Tensión muscular:
La mayoría de las veces, ni siquiera somos conscientes de ella...
Cuando te encuentras enfadado, ansioso, cansado o deprimido, tu cerebro incrementa de forma automática te sensibilidad al dolor. Si ya te molesta de forma natural, ahora te molestará todavía más. Pero, ¿cómo es posible? La clave para entenderlo reside en tu propio miedo que hace que te tenses, que tu respiración sea menos fluida y que el dolor vaya en aumento. Cuando una persona se centra cada vez más en sus pensamientos positivos es más optimista y se relaja, el dolor no desaparecerá, pero será mucho más llevadero. Por ello, siempre digo que el primer medicamento antiinflamatorio natural que debemos tomar cuando algo nos duele: es centrarnos más en nuestra propia actitud.Nuestras emociones:
La relación entre la mente y el cuerpo...
¿PORQUÉ NOS CONTRACTURAMOS?
Cuando ciertos músculos están trabajando más tiempo de lo que deberían (o de lo que pueden soportar), es cuando se produce la tensión muscular y las conocidas contracturas. El exceso de trabajo provoca que se acumulen ciertos productos químicos en las fibras musculares formando lo que denominamos puntos gatillo o «nudos». Hay multitud de músculos que pueden sufrir dichas tensiones, siempre dependiendo de la persona y de cómo ésta utilice su cuerpo: la mandíbula, la parte posterior del cuello, los hombros, la zona lumbar, los glúteos… Como os decía antes, este exceso de tensión muscular es el que «tira» de las articulaciones aumentando la compresión, y activando los circuitos del dolor.
Si duele, mejor no moverse...
Es uno de los errores más típicos en personas mayores.
Una reacción muy habitual al dolor crónico es evitar el movimiento. Realizar alguna actividad nos produce cierto miedo porque sentimos que el dolor va a ir en aumento. Pero tenemos que comprender que en vez de hacer algo que nos beneficia, quizás dicha actitud sólo sirva para empeorar las cosas… Seguir evitando la actividad sólo hará que tu sistema nervioso sea cada vez más sensible al movimiento, haciendo que éste se produzca con más frecuencia. El sistema nervioso tiene zonas de bienestar y de dolor, si evitamos la actividad, le restamos la oportunidad de utilizar los canales de bienestar reforzando más los otros. Por ello es tan importante ir incluyendo actividades con movimientos lentos, rítmicos y relajados; sensaciones como el masaje, la vibración o el calor (por ejemplo) también contribuirán a estimular estos circuitos del placer. De hecho, el masaje es una de las mejores opciones cuando la persona siente mucho dolor (como es el caso en personas con fibromialgia).Ahora bien, no se trata de ir al masajista y listo, necesitamos poner siempre de nuestra parte y realizar ejercicios o actividades por nuestra propia cuenta porque sino, los músculos no recibirán el estímulo suficiente de contracción. La combinación de masaje y actividad física es una de las maravillas que tenemos hoy en día para recuperar nuestro estado de salud, lástima, que muy poca gente se dé cuenta de que uno no puede funcionar sin el otro…
Masaje profesional
Si tu espalda sufre de fuertes contracturas o un exceso de tensión muscular, no dudes en pedir hora y probar uno de mis masajes descontracturantes. Haré una valoración de tu situación, rebajaremos toda esa tensión y juntos, buscaremos las causas y las posible soluciones al problema.El desequilibrio estructural:
Hay que tenerlo siempre en cuenta...
Lo ideal sería que nuestra columna se mantuviera recta y bien equilibrada. Cuando esto no sucede, estaremos sobrecargando la columna y produciendo cierto desgaste que con el tiempo vamos a notar.
Resumiendo:
Es muy importante tener en cuenta qué posturas utilizamos en nuestro trabajo, o cuales mantenemos en general en nuestro día a día. Mantener una postura tensa durante mucho rato puede perjudicar seriamente nuestra salud, ya que al tensar la musculatura impedimos que la sangre y la energía (Qi) circulen con normalidad.Si os duele mucho la espalda y queréis aprender a tomar buenas posturas, os recomiendo un libro muy antiguo que va de perlas para aprender a ser conscientes de nuestro movimientos. Se trata de: El gran libro del dolor de espalda», de Mike Hage; editorial Paidós.
Xavier Turell Nebot
Dolor de espalda
Masaje descontracturante